He acabado de leerme The Book of Risks, de Dan Borge, un recomendable libro para quienes les interese la gestión de riesgos en proyectos, en operaciones, en empresas. En él nos habla de Amos Tversky & Daniel Kahneman quienes en los años 70 del siglo pasado fueron los primeros en reconocer que hay muchos obstáculos en el camino hacia una toma de decisiones racional en lo que a los riesgos se refiere… …y que están enraizados en la psicología humana.
Nos dicen que no es únicamente un problema de poca información, de poco tiempo para pensar o de equivocarnos en las operaciones… Nos hablan de una serie de comportamientos humanos que aparecen en el momento de tomar decisiones una y otra vez…
Vamos a ir viéndolos:
Exceso de confianza…
Solemos subestimar el rango de posibles resultados para eventos inciertos… Asumimos que las posibilidades más extremas , tanto las buenas como las malas, son mucho menos probables de lo que realmente son…
…y nos centramos en un espectro de posibilidades que es excesivamente estrecho. Y luego nos sorprendemos de que se produzcan resultados que se escapan de las opciones que consideramos al tomar las decisiones.
Las consecuencias del exceso de confianza pueden ser tanto tomar excesivos riesgos como dejar pasar magníficas oportunidades. Y suele ocurrir que somos más propensos a subestimar los riesgos que las oportunidades debido a un hábito… que es el…
Optimismo¡
Un excesivo optimismo nos lleva a esperar resultados mejores de los que hubieran resultado de una evaluación más desapasionada de las opciones. Todos pensamos que conducimos mejor que la media… … pero solamente un 50% de los conductores conduce mejor que la media… Y la mayor parte de nosotros exageramos a la hora de evaluar nuestra capacidad de controlar los eventos y subestimamos las probabilidades de eventos negativos que, de hecho, están fuera de nuestro control.
Las consecuencias de un excesivo optimismo pueden ser el tomar riesgos excesivos, sobre todo en situaciones en las que consideramos que tenemos todo bajo control) o correr detrás de oportunidades con muy pocas opciones de recompensas razonables…
Retrospectiva (defectuosa)
¿Porqué somos tan confiados y excesivamente optimistas? No aprendemos de nuestra experiencias (que es como llamamos a nuestros errores, O. Wilde dixit)?
Las sorpresas y decepciones debieran enseñarnos a ser más realistas en nuestras evaluaciones de las probabilidades de que ocurran determinados eventos, no? Pues no… no necesariamente. Porque otro de nuestros problemas es según estos autores, es la faulty insight, retrospectiva equivocada.
Básicamente, malinterpretamos hechos pasados. Si nuestro equipo pierde, decíamos que ya lo veíamos venir (incluso aunque durante el partido pensáramos lo contrario). Si uno de nuestras inversiones fracasa, nos castigamos por no haber actuado ante indicios que nadie pudo ver. Esta tendencia a reescribir la historia para que justifique nuestras sorpresas y decepciones dificulta que reconozcamos los errores producidos por nuestro exceso de confianza y optimismo.
Os ocurre esto a vosotros…?
El próximo día continuaremos con la búsqueda de patrones inexistentes…
Me parece un tema apasionante. Te puedo decir la respuesta que he recibido cuando he preparado una gestión de riesgo rigurosa: «eres un pesimista», «así no vamos a vender nada», «solo sabes poner problemas»… El rosario es interminable.
En estas condiciones ¿crees realmente que un PM va a identificar riesgos? La respuesta es NO, categóricamente, porque si lo hace su carrera como PM tiene caducidad.
Hace mucho tiempo que comparo el trabajo del PM y de sus responsables con el de un capitán de navío y el armador. Un ejemplo claro es el Titanic. Muchos PMs somos capitanes de barcos en los cuales el armador no quiere ni oír hablar de riesgos.
El análisis del riesgo se confunde con cobardía, con negatividad y lleva a caer en los mismos agujeros en cada proyecto ¿por pecar de optimistas? No siempre, por pecar de cautos y querer mantener el trabajo.